Una gran cantidad de arcos fueron construidos en Cusco durante el periodo colonial. Unos eran para canalizar agua (acueductos), otros para marcar límites y servir de entrada a las ciudades. En el Cusco colonial, el arco demarcaba la sociedad española y su separación de la sociedad natural (aparentemente entendida entonces como población indígena).
Arco de Santa Clara
En el extremo sur de la Plaza de San Francisco hay un monumento de piedra caliza con un gran arco en el centro y arcos más pequeños a cada lado. En la parte superior del monumento se encuentra la Estatua de la Libertad, tallada por orden del gobernador José Medina, quien construyó un arco llamado “Arco de la Libertad” para conmemorar permanentemente la liberación de los peruanos de la amenazante tutela española.
Arco de San Andrés
Lamentablemente este es el Arco de la República, uno de los edificios que no sobrevivió al terremoto de 1950, y fue reconstruido en 1998, cambiando su forma original. La estructura ahora es casi completamente de hormigón en lugar de la estructura de piedra original. El aumento del número de vehículos motivó el ensanchamiento del arco central, lo que es evidente en la situación actual.
Si te interesa conocer estos arcos en el Cusco, puedes hospedarte en el Hotel Rojas Inn, con una excelente ubicación en el corazón de la ciudad Imperial del Cusco y a unos pasos de la plaza de Armas, su estadía será de una experiencia inolvidable.